Hay días que uno se siente bien, y hay otros días que uno no sabe cómo se siente. No es que no lo sepa, sino que se siente como una mierda, acojonado y algo como… claustrofóbico, no sé, algo así con miedo a coger un lápiz para ponerse a pintar. Estos días se pasan porque en realidad todo va bien, aunque hay veces que no queremos creérnoslo. Palabrejas.Podría ser un chupador de sangre.
No Comments